Un grupo de investigadores japoneses del Centro RIKEN para el Desarrollo Biológico creó una piel que suda y en la que también crece el pelo.
El portal de digitaltrends.com informó que de acuerdo a un estudio publicado en la revista académica Science Advances, el tejido fue implantado en animales y los resultados fueron sorprendentes.
Y es que el tejido se adaptó e integró fácilmente al resto de la piel original de un grupo de ratones, a través de fibras en los músculos y nervios, lo cual marcaría un precedente para que los investigadores puedan encontrar cómo crear piel para pacientes que han sido víctimas de quemaduras, o en quienes padecen enfermedades en la piel.